El poder curativo de la manzanilla
La manzanilla es una planta aromática una de las más conocidas y es usada por su gran cantidad de propiedades curativas y también estéticas. Es originaria de Europa occidental y del norte de Asia, aunque antiguamente crecía en abundancia en Grecia por motivos ornamentales, medicinales y formando céspedes.
Se la ingiere mayormente en infusión, pero también se puede utilizar en cremas , lociones y baños.
Desde hace siglos, las madres y abuelas hacían uso de ella cuando nos dolía la barriga, nos daban una infusión de manzanilla.
Las principales propiedades de la manzanilla
La manzanilla tiene propiedades antiespasmódicas y sedantes por lo cual está indicada sobre todo en los casos de trastornos nerviosos en los adultos, niños y en las mujeres durante el ciclo menstrual para reducir los dolores.
La manzanilla es antiinflamatorias, antialérgicas, antibacterianas posee buenas ventajas digestivas, por lo que se recomienda beber una taza de manzanilla después de comer para aliviar dolores, calmar la pesadez y hasta en casos de úlceras o gastritis.
Es muy buena para tratar afecciones respiratorias como ser el asma, el resfrío, la fiebre alta y la bronquitis.
Se aconseja la manzanilla a aquellas personas que no pueden dormir y que se tomen una infusión de manzanilla para conseguir sueños más profundos.
Además, mejora la digestión, facilita la expulsión de gases intestinales y mitiga los espasmos estomacales que generan hinchazón y es efectiva por su ácido salicílico natural, en casos de cefalea, neuralgias y migraña.
Entre los componentes de la manzanilla se encuentran los aceites esenciales que le otorgan su sabor y olor característico, cumarinas, resinas, sesquiterpenoides, flavonoides, mucílagos, ácidos grasos, vitamina C, y betacaroteno, ácido valeriánico, fenoles, entre otros.
La manzanilla no es recomendada para las embarazadas ya se considera un abortivo
Entre los componentes de la manzanilla se encuentran los aceites esenciales que le otorgan su sabor y olor característico, cumarinas, resinas, sesquiterpenoides, flavonoides, mucílagos, ácidos grasos, vitamina C, y betacaroteno, ácido valeriánico, fenoles, entre otros.
La manzanilla no es recomendada para las embarazadas ya se considera un abortivo